martes, 13 de octubre de 2009

Relaciones humanas

Hoy me ha tocado reflexionar y el tema en cuestión ha sido las relaciones humanas y como se puede pasar de un tema a otro a través de las vivencias y los pensamientos. Estas son mis últimas conclusiones sobre mis relaciones para/con el género masculino:


"Soy estupenda y divina a tiempo parcial. A veces inspiro y a veces soy invisible. Aunque a lo mejor soy estupenda y divina fija discontinua, o estupenda y divina hasta fin de obra o servicio".


Y toda esta parafernalia ¿Para qué? Para recibir una oferta de rollo estable digna de calibrar. Lo ideal en estos casos es lo que hemos leído en los cuentos, te enamoras y eres correspondida...pero no, ya en estos tiempos modernos que vivimos las proposiciones son otras, tales como la de: "Mira verás, no quisiera que te hicieras ilusiones, por eso quisiera aclararte ahora para no hacernos daño ni que haya malos entendidos de que solo somos amigos con derecho a roce y sin ningún compromiso". Claro amigos que serían fijos discontinuo dependiendo de la disponibilidad de ambos y solo con derecho a roce.


En fin hay que ver como han cambiado las relaciones humanas desde los tiempos de nuestras abuelas que las parejas se casaban "para toda la vida", sin embargo ahora existen los derechos a roces fijos discontinuos hasta que no les salga a los implicados algo mejor.


Y creo que realmente el problema es de la edad, la mitad venimos de vueltas con las carretas y ya no nos casamos ni con San Pedro que bajase del cielo, no, ahora nos dedicamos a desconfiar de todo el mundo y a poner faltas, esperando esa persona ideal que nunca llegó y que como por la encontrada no merece la pena tirarlo todo por la borda, se ha creado la relación de "amigo con derecho a roce" porque todos nos hemos hecho caseros, cómodos y lo más preciado que tenemos es nuestra libertad a decidir el qué, cuándo, cómo y dónde...ya no existe la creencia ciega de "y comieron perdices" excepto algunos arrojados que apuestan todo a una carta.

Posiblemente son los que triunfan, los que lo arriesgan todo sin temor a equivocarse y tener que comenzar de cero...

En fin son los tiempos que nos han tocado vivir, aun así prefiero seguir con mi coraza de acero y preocuparme de otras facetas de mi vida que me reportan también muchas satisfacciones y con las que disfruto día a día para no tener que terminar vomitando después de un derecho a roce carente de química, afecto o amor.

Puestos aaa...pongo un burdelito, cobro y hago negocio ahora con la crisis. ¡vamos! ¿digo yo no?

1 comentario:

Chesana dijo...

El derecho a roce sin mayor compromiso no es un invento moderno, lo que pasa es que ahora, sobre todo las mujeres, no escondemos que discrepamos.

Y tienes razón en que llegados a una edad, ya no nos conforma el "contigo pan y cebolla", y que nos volvemos cómodos, muy cómodos.

Sabiendo como sabemos todo eso... no te dejes utilizar. Acepta lo que quieras aceptar, pero no vayas nunca a ningún matadero ajeno si no quieres ir.